Aumento de las colecciones y de los servicios digitales, protagonistas del año 2020 en la BNE
Con el nuevo año, la Biblioteca Nacional de España revisa sus indicadores de actividad del ejercicio anterior para valorar sus cifras y hacer balance de su estrategia, funciones y misión. El 2020 ha sido un año marcado por la incertidumbre a causa de la pandemia internacional que ha modificado los programas, los modos de trabajo y los calendarios de todas las instituciones culturales, representando el cierre temporal de muchas de ellas durante los meses de mayor incidencia del virus.
A pesar de esta circunstancia, y del cierre de sus puertas durante meses, la BNE ha mantenido su pulso y no ha parado su actividad gracias al teletrabajo de su personal, lo que ha hecho posible que las colecciones hayan permanecido accesibles en todo momento, las consultas se hayan mantenido al día y se hayan descargado miles de contenidos digitales para todo uso.
Aumento de las colecciones físicas y digitales
Uno de los principales objetivos de la Biblioteca Nacional de España es el del aumento de sus colecciones, su actualización y mantenimiento para que sean cada vez más completas para los ciudadanos e investigadores.
En 2020, la BNE ha conseguido muy buenos resultados a pesar de las circunstancias. En este año han ingresado 453.415 documentos físicos en la BNE (a través de los diversos canales de los que dispone la institución: Depósito Legal, compra, donativo y canje), una cifra mayor que en 2019, cuando ingresaron alrededor de 440.000 documentos.
Las colecciones se incrementan, sobre todo, a través de la compra, y, en 2020, las compras han sido un 112,79% superiores a 2019, con un total de 5.924 ejemplares adquiridos.
Como no podía ser de otra forma, las colecciones digitales también han aumentado respecto a 2019 y confirman la importancia de una plataforma como DL-e (Depósito Legal Electrónico), que ha mostrado aquí su fortaleza: se han guardado más de 250 Tb de información de la web (18,81% de incremento respecto a 2019) y las publicaciones en línea depositadas han llegado a 12.497 (+24%).
El catálogo ha crecido en 128.647 títulos y 220.829 ejemplares dados de alta en total (cifras, en este caso, un 40% inferiores al pasado año).
La preservación de las colecciones físicas es igualmente importante y en 2020 se han revisado 5.389 ejemplares, y se han tratado 3.329 para su conservación.
Servicios digitales con cifras récord
Los servicios bibliotecarios que nos acercan a los usuarios y les hacen partícipes de nuestras colecciones se orientan cada vez más hacia lo digital, pero dadas las circunstancias de 2020, ese movimiento ha tenido más valor que nunca y con resultados que conviene destacar: más de 5 millones de usuarios (5.316.973 en total) han realizado más de 8 millones de visitas (8.693.901) a la página web de la BNE (un incremento del 27,5% respecto a 2019).
La Biblioteca Digital Hispánica ha recibido 1.927.667 visitas (29,25% de incremento) de 1.142.696 usuarios, y ha tenido, además, un aumento de su propio catálogo marcado con 3.520 nuevos títulos y 550.061 nuevas páginas disponibles. Por su parte, la Hemeroteca Digital ha incrementado en 3.427.160 las nuevas páginas disponibles, y sus visitas han superado el millón de consultas (1.001.517, un 19,85% de incremento respecto al pasado año), descargándose más de 3 millones de documentos digitales.
Durante el confinamiento, el acceso y las descargas de las colecciones digitales batieron todos los records llegando a duplicarse en algunos periodos concretos. Si comparamos el 2º trimestre de 2019 con el 2º trimestre de este año, los datos hablan por sí solos.