Felicidades, Matilde. Gracias a ti, y a personas como tú, las instituciones han seguido funcionando a pesar de las crisis, los baches y los problemas. Si, además, se le une el hecho de ser una excelente persona y poner siempre una palabra y un gesto amable a cualquier situación, comprenderás que todo el mundo te quiera y, a partir de hoy, te echen de menos. Tú sí que eres “memoria histórica”. Un abrazo, de alguien orgullosa de haber sido tu jefe. Charo
Felicidades, Matilde. Gracias a ti, y a personas como tú, las instituciones han seguido funcionando a pesar de las crisis, los baches y los problemas. Si, además, se le une el hecho de ser una excelente persona y poner siempre una palabra y un gesto amable a cualquier situación, comprenderás que todo el mundo te quiera y, a partir de hoy, te echen de menos. Tú sí que eres “memoria histórica”. Un abrazo, de alguien orgullosa de haber sido tu jefe. Charo