¿Y si un día desaparecieran todos los documentos e imágenes que hemos ido guardando en los ordenadores durante décadas? ¿Y el ingente fondo digitalizado de instituciones, fundaciones y bibliotecas? Los estudiosos y “padres de Internet” ya plantean que cuando el hardware y el software actual se vuelvan obsoletos podríamos entrar en lo que denomina "la era oscura digital", en la que las futuras generaciones no tendrían registro alguno del siglo XXI.

En MEMORIA SONORA desgranamos las claves de este concepto que retrata cómo algunos periodos de la historia se han desvanecido en el tiempo porque nos faltan fuentes para recomponerlos, para releerlos.

Muchos defienden que estamos inmersos en una Edad Oscura Digital e instituciones como Internet Archive y bibliotecas nacionales como la de Suecia llevan archivando el patrimonio documental que hay en la web desde 1996. Desde entonces, otras instituciones patrimoniales han trabajado para preservar las publicaciones en línea, la BNE es una de ellas.