Getting It rigth - The evolution of reference collections
Margaret Landesman
The Reference Librarian, n. 91/92, 2005
Artículo en el que se realiza un interesante recorrido por la historia del servicio y de las colecciones de referencia. El concepto de "Referencia" entendido como servicio de la biblioteca, es una innovación del siglo XIX. Sin embargo, las fuentes de referencia son documentos que se remontan a las primeras civilizaciones, como demuestran las listas de reyes, genealogías o diccionarios de términos extranjeros hallados en las bibliotecas de Asiria, Egipto, Grecia y Roma. Incluso el concepto que vincula las obras de referencia a materiales no prestables y, por tanto, exentos de circulación, puede tener como precedente la costumbre iniciada en las bibliotecas monásticas de encadenar determinados libros, costumbre que más tarde imitaron importantes bibliotecas bajomedievales como la de la Universidad de la Sorbonne. Uno de los primeros precursores del servicio de referencia fue Samuel Swett Green, quien, en una conferencia de bibliotecarios celebrada en Boston en 1876, instó a las bibliotecas a que ofrecieran a sus usuarios este tipo de ayuda profesional. El término "obra de referencia" apareció por primera vez en 1891 en el índice de la revista "Library Journal". Gran parte del artículo está dedicado a comentar el impacto de las nuevas tecnologías en los servicios de referencia, desde los primeros servicios de búsqueda comerciales tipo Dialog, hasta las actuales bases de datos en línea accesibles via web, pasando por las bases de datos en CD-ROM y el impacto de las primeras redes LAN. El artículo finaliza con una reflexión acerca de la pervivencia de los bibliotecarios referencistas. El argumento del autor se basa en la idea de que si ya era difícil encontrar una información concreta cuando las fuentes disponibles eran pocas, hoy en día esta dificultad es aún mayor al haberse multiplicado las fuentes donde buscar.
Resumen elaborado por: Mayte Blasco Bermejo