1973–2008: El futuro es sólo una puerta

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1973–2008: El futuro es sólo una puerta

La próxima Conferencia Anual de la IFLA tendrá lugar en Milán y su tema será “La bibliotecas crean futuro: edificar sobre la herencia cultural”. Es una invitación excitante y sirve de contrapeso para los que piensan que toda información es conocimiento, para quienes confunden buen apetito con insaciabilidad, sin darse cuenta de que toda información es ayer. ¿Vuelve la cultura como descanso? ¿Es acaso ella el campo, dentro del mundo de la información, que cultivan todavía los “archiveros, bibliotecarios y arqueólogos”? ¿Sigue asentándose sobre el Patrimonio documental, bibliográfico y artístico de la Nación? Sencillamente: ¿debe seguir vivo el Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos?.

Pero el nombre sigue estando vigente. Emulando al clásico, “habent sua fata nomina”. La última convocatoria (O. 30. 04. 2008) para el primer ejercicio de oposiciones es “para ingreso en el Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos”.

Hay, sin embargo, otras señales. En la definición del Cuerpo Auxiliar de Archivos, Bibliotecas y Museos (creado por la Ley de Presupuestos de 1932), que se hace en la primera convocatoria a oposiciones al mismo, se insiste en su carácter mixto (administrativo y técnico), pero ni la tendencia a expandirse de la burocracia ni el mismo sentir de los miembros de dicho Cuerpo respetaron mucho esta condición dada su tendencia y la los facultativos a considerarse miembros de una misma profesión. La Ley 22/1977 (30. 03) fue, pues, un gran acierto al resolver el problema de la ambigüedad y venía a ser corroborada por la Ley 30/1984 en la que se creaba la figura de la “promoción interna”. Los extremos de tocan: la justicia de esta última disposición venía a completar la justicia que había llevado un siglo antes a suprimir la categoría de Ayudantes del Cuerpo. La existencia del Cuerpo de Ayudantes de Archivos, Bibliotecas y Museos –y con más fuerza que la pervivencia del nombre completo del Cuerpo Facultativo– sigue dando testimonio de la unidad de una profesión.

El Cuerpo Facultativo, incansable siempre en su labor docente y la edificación de los nuevos centros universitarios especializados, ha dado frutos envidiables y envidiados. A los miembros de un Cuerpo con cicatrices y poco aderezado con distinciones públicas, el cuerpo nos pide creer (y que la Nación y los Gobiernos crean) que el futuro del Cuerpo sigue intentando comenzar todavía.