El viernes 12 de julio treinta niños de entre cinco y doce años fueron comisarios y guías de su propia exposición. Con esta actividad en la Sala Mínima, se clausuró el primer grupo de talleres de verano de la BNE.

Ante la atenta mirada de sus padres y familiares, los niños explicaron cómo las hazañas del Cid campeador, los grabados de Piranesi y las ilustraciones del Libro de Horas de Carlos V habían servido de base y de principal inspiración para sus obras.

La exposición, de nombre Tesoros en la Mínima, mostró el ingenio y la dedicación de los más pequeños, que presentaron desde dibujos, maquetas y cuadros hasta visores estereoscópicos, pasando por recreaciones de ilustraciones medievales y fotografías realizadas mediante cianotipia.

Este lunes día 15 de julio comienza el último taller de verano, en el que los niños podrán disfrutar de exposiciones, juegos, dinámicas de grupo y proyecciones. Este último finalizará el 26 de julio, cerrando los talleres preparados por la BNE para este verano.